Todavía tiene algunos "pequeños problemas en la electrónica", pero vuelve a competir en el trazado donde ganó por primera vez con Yamaha.
Está convencido de que es su año. Maverick Viñales (Movistar Yamaha MotoGP) arranca la temporada donde el año pasado consiguió la gloria en su primera carrera a los mandos de una Yamaha. El piloto de Roses está “emocionado con llegar a Qatar y comenzar la temporada. ¡No puedo esperar!”. El año pasado fue difícil para él, “con muchos altibajos”.
Una vez completada la temporada del aprendizaje, vuelve a tener la presión encima: “Siento que podemos hacer grandes cosas y que podemos luchar por el título. Estoy seguro de que estaremos siempre arriba”. Llega tras una pretemporada más complicada que la de 2017: “La pretemporada ha ayudado, aunque tenemos algunos pequeños problemas con la electrónica”. El optimismo vuelve a reinar en la marca de Iwata: “Podré dar mi 100 por ciento, es una pista que me gusta mucho y donde gané mi primera carrera con Yamaha”.
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