El jefe de Mercedes asegura que confía en que sus dos pilotos se comporten en la carrera de este domingo mientras luchan por el Mundial e insiste en que Mercedes no interferirá en la batalla.
Al ser preguntado por si Hamilton podría taponar a Rosberg y hacer que el alemán pueda perder su posición, Wolff no negó que esto pueda pasar, pero subrayó que los pilotos saben cómo comportarse.
"Realmente no podemos interferir en la última carrera", dijo. "Les hemos dejado correr hasta ahora; ambos saben lo que consideramos deportivo".
"Pero hay mucho en juego mañana, hay un campeonato del mundo que puede ser ganado o perdido. Creo que ambos habrán pensado en sus posibilidades. Nosotros, mientras no traspasen el límite que consideramos como conducción deportiva, estaremos bien. Creo que necesitamos dejarles solos".
"No queremos cambiar las reglas para mañana, porque sería incorrecto que después de esos últimos dos años demos la vuelta a lo que hemos estado haciendo".
"Ambos pilotos son grandes deportistas y saben lo que eso significa; traspasar la línea, crearía un montón de controversia. Por lo tanto, confió en que todo irá bien mañana, por el bien del equipo, de los aficionados, del espíritu que tenemos y del esfuerzo que se ha realizado".
El principal objetivo es no interferir
Wolff reconoce que no ha sido fácil para el equipo ser justo con ambos pilotos.
"Es una situación complicada para todos. Puedes decir que estamos en una posición privilegiada, ya que quien quiera que gane, será piloto de Mercedes. Lo cierto es que nos hemos mantenido neutrales durante los últimos tres años".
Fuente: Adam Cooper/ lat.motorsport.com
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